martes, 25 de septiembre de 2012

En medio de una gran confusión. Bones.

No estoy lista para dejarlo, pero tampoco puedo seguir, quiero llorar cada vez que como, quiero escupir y vomitar, quiero correr.





40.. La misma herida, cada vez más profunda. Sólo me queda la cicatríz, ¿qué más quiero? Ahora me atormenta el fantasma, el recuerdo.




 

Odio esto. Bones.






Año nuevo. Año viejo.

 Me cancé de ser anoréxica, de tener el cabello feo se cae MUCHO, en SERIO MUCHO, todo lleno de puntas abiertas, quiero mi cabello bonito LO QUIERO. Me cancé, me cancé mucho, ya no quiero ser más esto, ya no quiero llorar por comer, ya no quiero dejar sobras, pagar por un plato y dejar la mitad, o más, no quiero gastar de más. No quiero contar calorías, las odio, malditas calorías. Quiero despertar y verme bien, odio la maldita flacidez, quiero hacer ejercicio y aguantar, quiero poder dormir, no quiero tomar antidepresivos, no quiero depender de una pastilla. Quiero comer sin que me preocupe nada, quiero decir GRASA con cariño sin odiarla o sentir que mis dedos deben entrar a mi boca. Ya no quiero vomitar, detesto vomitar, no quiero vomitar. Ya no puedo ser anoréxica, ya no quiero verme gorda, no quiero pesarme y asustarme, no quiero llorar por números, quiero decir ¿Y QUÉ? ¿QUÉ CON QUE SEA GORDA? ¿QUÉ SI NO ME IMPORTA LO QUE COMO? Quiero ser como antes, no sé desde cuándo soy así, pero ya no quiero serlo más, ya no quiero. No quiero. Quiero que me ayuden, quiero que me hagan comer lo suficiente, que me saquen a hacer ejercicio, quiero salir con mis amigas y no avergonzarme por comer. COMER ES NORMAL. ESCENCIAL. COMER. Ya no quiero hablar de esto, ni tenerlo presente en mi mente TODO el tiempo, quiero correr lejos de Ana, maldita Ana, no quiero necesitar a Mía, quiero que mi vida solo me pertenezca a MÍ, no a Ana, no a Mía, ya no quiero verlas ni necesitarlas NUNCA Más. Quiero una vida normal. No, de hecho no, nunca he querido ser normal, nunc lo he sido, nunca lo seré. Me señalan, todos lo saben, ya se lo dije a mis maestros, pero ellos saben que quedó en mi pasado, ellos saben que ya no soy anoréxica, me asusto pero me gusta, me gusta ser yo. Me gusta no comer, aprendí a disfrutar mis mareos continuos, aprendí a tantas cosas, contar calorías, soy buena en nutrición, pero a pesar de que sé qué me nutre no lo consumo. No soy sana, no lo seré, lo siento, lo siento por mi y por todos, no sé si esto va a cambiar, no sé si podré siempre con eso, no sé si moriré. Ya ni es tanto por querer ser perfecta, claro que entra en las razones, pero no quiero ser perfecta, porque no soy humano del todo, porque no existe la perfección, solo quiero ser flaca. Flaca por siempre, para siempre, quiero ver mis huesos, tocarlos, sentirlos, que los vean, que los toquen, que los sientan, tan cerca de mi alma, tan yo al natural, a flor de piel, soy un alma en un cuerpo, no un cuerpo con alma, quiero huesos. Quiero ver 40 kilos frente al espejo, nada más, no quiero ver 46 gordos kilos, eso es MUCHO. Quiero tatuajes en mis huesos, no quiero carne en mi, quiero ser un esqueleto, quiero morir así, no sé qué quiero más, quiero que me quieran así ¡quiero ser bonita! Lo veo tan imposible, tan irreal e inalcansable. Quiero ser perfecta. Quiero alcanzar algo que no existe, eso quiero... Quiero existir y nada, NADA más.